No es la primera vez que lo decimos, pero hay personas que están predestinadas para triunfar.
Está claro que en esta carrera hacia el éxito es crucial el trabajo, la constancia, la formación y la necesidad de estar aprendiendo siempre cosas nuevas. Sin embargo, se puede cumplir con todas estas directrices y no llegar a alcanzar nunca ese ansiado reconocimiento si lo que falta es el talento, ese que solo los más afortunados tienen.
Rosalía es una de esas artistas que se ha hecho a sí misma y que ha conseguido trasladar más allá de nuestras fronteras las notas de un género tan nuestro como lo es el flamenco.
No ha sido un camino fácil para ella, y en algunas ocasiones incluso llegó a dudar de sus posibilidades de hacerse un nombre en la industria musical.
La vez que más cerca estuvo de tirar la toalla fue en 2008, cuando acudió al programa de televisión Tu sí que vales en busca de una oportunidad.
Allí su voz aguda y dulce no fue bien valorada por un jurado que vio potencial, pero no forma ni estructura.
Pero Rosalía se recuperó del golpe y continuó trabajando con más tesón que nunca hasta cumplir con su sueño, y hoy en día es una de las artistas más importantes del panorama musical internacional.
Su meteórica carrera puede compararse con la de Chris Moneymaker, un joven que pasó del más absoluto anonimato a convertirse en todo un mito dentro del mundo póker tras ganar las WSOP de 2003.
Rosalía ha hecho lo propio en la industria musical, aunque los 2,5 millones de dólares que ganó Moneymaker se quedan cortos al lado del patrimonio de la cantante, que solo contabilizando los beneficios que obtuvo en 2019 de sus reproducciones en Youtube y Spotify suma más de 8 millones de dólares.
Datos biográficos
Nació hace 26 años en el municipio de San Esteban de Sasroviras, en Barcelona, bajo el nombre de Rosalía Vila Tobella pero en la actualidad todo el mundo la conoce simplemente como Rosalía.
Esta joven catalana, sin raíces flamencas pero enamorada del género desde pequeña, se ha convertido en la mejor representante del flamenco en todo el mundo con un estilo que demuestra que la unión entre tradición e innovación puede ser posible también en el ámbito musical.
El trabajo con el que el dio el salto a la esfera nacional e internacional fue Los Ángeles, un álbum que supuso su debut en 2017 y que elaboró de manera conjunta con el también músico y productor Raül Refree, conocido tanto por sus trabajos personales como por haber producido a artistas de la talla de Christina Rosenvinge o La Mala Rodríguez.
La colaboración de ambos músicos llegó un día por casualidad, y es que tal y como ha explicado Rosalía en varias entrevistas, Raül y ella se conocieron por medio de un amigo común y tras charlar sobre sus intereses musicales ambos se dieron cuenta de que sus trabajos se desarrollaban siguiendo una línea común.
Un estilo único, que bebe de fuentes muy dispares entre sí como el blues, el jazz, el trap o el pop, pero siempre sobre una base flamenca.
Con Los Ángeles, un disco con la muerte como hilo conductor, Rosalía y su estilo transgresor, camaleónico y único se dieron a conocer para el gran público, pero su trayectoria ya era por aquel entonces envidiable para una joven que apenas superaba la veintena.
En 2013 participó en Nueva York en la APAP Conference, un año más tarde se convirtió en solista en el Palau de la Música y en 2015 cruzó el océano hasta Singapur para colaborar en el estreno del espectáculo de La Fura dels Baus.
Ese mismo año unió fuerzas junto a Rocío Márquez en el Primavera Sound, y en 2016 participó en el Festival de Jerez y en el Festival Internacional de Cadaqués como telonera de Miguel Poveda junto a Alfredo Lagos, quien también la llevó a la Bienal de Sevilla.
Su paso por ambos festivales andaluces, unido a la colaboración con el rapero C. Tangana en el tema “Antes de morirme”, terminaron por encender la mecha de lo que hoy se ha convertido en todo un fenómeno musical.
Una estrella emergente
Los éxitos de Rosalía se suceden unos a otros, difundiendo las raíces flamencas por todo el mundo.
Así, tras ver a artistas de Hollywood como Halle Berry bailando al son del trá, trá, la intérprete catalana llevó su estilo hasta la celebración de los Grammy Latinos en Las Vegas en 2018. Allí, no solo enamoró al público con una actuación plagada de juegos de luces y coreografías, sino que hizo historia para la música española al convertirse en la única representante nacional en ganar dos premios por un único trabajo: Mejor fusión/interpretación urbana y Mejor canción alternativa.
Tras sumar 4 Grammys latinos más en 2019, este 2020 ha vuelto a dominar en los Grammy, alzándose con el premio a Mejor disco latino de rock, urbano o alternativo por su disco El mal querer.
Un premio que se sumó a una actuación espectacular en una gala que estuvo dominada por el talento femenino.
No cabe duda de que Rosalía se ha convertido, gracias a su magnetismo y su heterogeneidad musical, en un huracán que arrasa con todo a su paso.
Siempre fiel a su voluntad de experimentar con nuevas expresiones artísticas, la catalana dio el salto al séptimo arte el año pasado de la mano de Almodóvar en la cinta “Dolor y gloria”.
Además, también creó una línea de ropa para Pull&Bear.
Sin duda, nos encontramos ante una de las embajadoras del flamenco con mayor proyección.
