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Las aplicaciones y la tecnología pueden ahorrar el consumo de energía de su hogar

El mundo se ha vuelto cada vez más perspicaz y nuestros hogares se han vuelto cada vez más sofisticados. La domótica está comenzando a inundar el hogar con gadgets y dispositivos inteligentes. Entre otras cosas, estos dispositivos inteligentes pueden reducir el consumo de energía. Por tanto, la tarificación correspondiente a fin de mes.

El argumento es obvio: en base a los datos de la encuesta de presupuestos familiares publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), alrededor de un tercio del desembolso medio de las viviendas españolas se utiliza para pagar la casa, el agua, la electricidad, el gas y otros combustibles. También han entrado en juego la conciencia ecológica y el confort: a través de los dispositivos y apps se pueden realizar de forma automática muchas operaciones que antes se realizaban de forma manual. Y es fácil controlar todos los costos.

La climatización del hogar el primer punto de ahorro

La mayor parte del gasto energético anual del hogar se destina a sistemas climáticos. Al introducir la automatización del hogar, debe recordarse que los sistemas más inteligentes son aquellos que pueden utilizar el calor natural, como las persianas inteligentes, por ejemplo.

Estos se pueden programar para que salgan cuando salga el sol y se pongan cuando llega la noche para aprovechar el día y ahorrar calefacción. Los sistemas de domótica para persianas (como DIO) también permiten el control remoto a través de la telefonía móvil.

Una vez asegurado el máximo aprovechamiento del calor natural, la temperatura debe mantenerse en un nivel óptimo. Aquí es donde entran en juego los mecanismos de termostato inteligente y programable. Por lo general, comienzan con acciones básicas, como bajar la temperatura del sueño antes de comenzar las actividades y subir la temperatura por la mañana. Sin embargo, algunos termostatos inteligentes (como Nest Thermostat E) analizarán nuestro horario e incluso pueden detectar cuando no hay nadie en casa para bajar la temperatura.

Es importante contratar la compañía de luz más barata para garantizar un ahorro de costes significativo.

En algunas zonas de España, el sistema de aire acondicionado también es especialmente importante. Además de los dispositivos programables, también hemos visto la aparición de mecanismos de control climático como Ambi Climate 2 en los últimos años. Es una estación de medición que utiliza sensores para analizar la temperatura ambiente, la humedad y la luz solar.

Con la ayuda de la inteligencia artificial, asocia estos datos con la hora del día y el tipo de clima, y ​​genera un tipo de aire acondicionado personalizado. Finalmente, envía un pedido al aire acondicionado (es compatible con más de 1200 modelos). El dispositivo se puede controlar a través de un teléfono móvil y se estima que economiza hasta un 30% de energía.

La electricidad es el paso siguiente

Evitar aparatos eléctricos en modo de espera o usar bombillas de bajo consumo puede mejorar significativamente el efecto de ahorro de energía. Sin embargo, debido a los dispositivos inteligentes, especialmente las aplicaciones que pueden mostrar qué consumimos, cómo y por qué, todavía hay mucho margen de mejora.

Los sistemas de iluminación inteligente como Philips Hue se pueden controlar mediante teléfonos móviles o asistentes virtuales como Alexa o Google Home. Algunos también tienen un sistema de detección de movimiento, por lo que las luces de la habitación se encienden cuando alguien entra y se apagan inmediatamente después de salir de la habitación.

Otra solución son los enchufes domóticos, que permiten programar el interruptor del dispositivo o recibir una alerta cuando se produce un problema y se produce un consumo excesivo. O un mecanismo de monitorización del consumo, un pequeño dispositivo que analiza el consumo en casa.

Control del consumo de agua

Aunque este no es el mayor gasto de la familia, el ahorro de agua también se nota a fin de mes. Este también es un punto importante para quienes más se preocupan por el ecosistema.

Una forma eficaz de aminorar significativamente el consumo de agua es introducir sensores para detectar mal funcionamiento, fugas o roturas en tuberías, grifos y electrodomésticos. Por ejemplo, Grohe Sense enviará una señal al teléfono cuando detecte un problema. Además, analiza el consumo de agua de los hogares y proporciona datos que pueden ayudar a mejorar el consumo de agua. Otra solución es introducir electrodomésticos como lavavajillas o lavadoras, que no solo consumen menos energía, sino que también usan menos agua por lavado.

Todos estos dispositivos y aplicaciones pueden facilitar las tareas del hogar y promover la conservación de energía. Sin embargo, su gestión puede ir más lejos: nos permite entender por qué y sobre qué gastamos más dinero. Es precisamente por esta información que podemos cambiar algunos hábitos y optimizar realmente la eficiencia energética.